La Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), en concreto el departamento de Prevención de Riesgos Laborales, ha realizado una guía para la elaboración e implantación de un protocolo de acoso laboral en las empresas y que pretende abarcar las distintas manifestaciones de acoso en las relaciones laborales.
El acoso, desde la perspectiva de la prevención de riesgos laborales, está considerado un riesgo de índole psicosocial y, al igual que en el resto de los riesgos laborales, las empresas tienen la obligación legal de prevenir, evaluar y adoptar las medidas necesarias para su control y eliminación.
Por ello, la patronal malagueña, con la financiación de la Fundación Estatal para la Prevención de Riesgos Laborales, ha elaborado este documento, cuyo objetivo general es dotar a las empresas de un instrumento para la gestión del acoso psicológico «desde una perspectiva integradora y accesible, para dar respuesta a la preocupación del tejido productivo malagueño acerca de los aspectos relacionados con los riesgos psicosociales».
En los últimos años se ha incrementado el interés, por parte de entidades públicas y privadas, por ampliar el conocimiento general sobre estos riesgos, se han implementado herramientas de detección y se han generalizado las actividades formativas dirigidas a empresarios y trabajadores, sin embargo, han indicado desde la CEM, es preciso «ahondar aún más en la difusión de la actividad preventiva».
«Es preciso generar una cultura de proacción en Prevención de Riesgos Laborales (PRL), que comprometa por igual a todos los agentes implicados y que se ponga en marcha desde todos los ámbitos», han sostenido.
Con esta guía, que se puede descargar a través de la web de la CEM y otras como www.clubemprendedoresmalaga.es y www.gabineteprevencioncem.es, se quiere aportar una herramienta de consulta para que las empresas puedan avanzar en la integración de la PRL, «contribuyendo al logro de lugares de trabajo más seguros para todos».
El acoso en las 60 empresas consultadas para la guía
Para elaborar el documento y que la guía supusiera una herramienta preventiva práctica, eficaz y que se adaptara a cualquier tipología de organización, dotándola de las herramientas de prevención necesarias, 60 empresas han facilitado, de manera confidencial a través de un cuestionario, la información sobre las prácticas y experiencias llevadas a cabo en sus organizaciones sobre la gestión de riesgos psicosociales, conflictos y situaciones de acoso.
La mayoría de las empresas participantes (71,67%) pertenecen al sector servicios; al sector de educación y/o sanidad (11,67%), sector tecnológico (10%) y el resto (6,67%) al industrial.
Respecto a la modalidad preventiva, el 76,67 por ciento de las empresas tienen un servicio de prevención externalizado, mientras que las restantes poseen servicio de prevención propio o mancomunado. La mayoría no disponen de una política de gestión de riesgos psicosociales, de hecho, sólo lo tienen 14 empresas de las consultadas.
Sobre las herramientas existentes para la prevención del acoso laboral de cualquier naturaleza, sólo el 26,67% de las empresas consultadas disponen de un procedimiento interno de gestión de conflictos; el 38,33% tiene un código de conductas y el 30% de las empresas cuentan con un protocolo de acoso laboral.
En cuanto a la incidencia de los casos de acoso denunciados en las empresas participantes, en el 18,33 por ciento de las empresas han existido denuncias de acoso. Así, se emplearon para hacerle frente: protocolo de acoso, evaluación psicosocial, demanda por vía judicial, y creación de un comité específico.
En el 90% de los casos no han existido casos de denuncias falsas y en las empresas que se han producido, se han resuelto utilizando protocolo, evaluación o creación de una comisión al efecto, han manifestado desde la patronal malagueña.
Según la valoración de la CEM, se aprecia que las prácticas más extendidas para hacer frente a las situaciones de violencia y acoso en el trabajo «carecen normalmente de la necesaria visión sistémica, y no resultan suficientemente preventivas».
Acoso sexual o por razón de sexo
En esta publicación, de 58 páginas, se aborda el acoso psicológico en el trabajo, con los tipos de conductas, relaciones, identificación de las partes, frecuencia, duración y dónde se produce; se distingue el acoso sexual y el acoso por razón de sexo; se realiza el diagnóstico de la realidad empresarial –según las empresas consultadas– y se aborda el procedimiento de solución de conflictos de violencia.
Asimismo se incluye el protocolo para la prevención de los distintos tipos de acoso o discriminación y el establecimiento de un procedimiento para tratar los casos que puedan denunciarse, incluyendo una declaración de principios, el ámbito de aplicación del protocolo, medidas de prevención, procedimientos de actuación en caso de denuncia, etcétera. También se incluyen modelos de código de conductas, de comunicado a los trabajadores, de denuncia por acoso, un diario de incidentes, etcétera.
Esta guía se ha elaborado a lo largo de 2019, tras la aprobación por parte de la Fundación Estatal para la Prevención de Riesgos Laborales, que es el organismo que la financia a propuesta de CEM junto con otras actividades.
Así, el plan de trabajo propuesto desde la CEM a dicha Fundación además de la guía, consta de atención y resolución de consultas en materia de PRL y la realización de cinco sesiones informativas:
- Implantación del protocolo para la prevención del acoso.
- Clima laboral.
- Compromiso en la empresa.
- Ayudas destinadas a pymes en materia de PRL.
- Empresa saludable.
- Riesgos psicosociales en la empresa.
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