Desde FUNDACION ERGON hemos contado, dentro de nuestros “Diálogos_Ergon”, con la participación de Gloria Múgica Conde, Directora General de Lanbide – Servicio Vasco de Empleo para conocer, de primera mano, cuáles son las principales funciones que debe cumplir un servicio público de empleo, en un momento en el que arranca el plan de recualificación y recolocación en sectores en crisis en el País Vasco y en el que Lanbide participa de forma activa.
En opinión de Gloria Múgica, “nuestro primer objetivo es que Lanbide sea un verdadero organismo de servicio público, que atienda a todos los elementos que componente el ecosistema del empleo en el País Vasco. Y la realidad es que, ahora mismo no estamos dando este servicio, sino que nuestro día a día lo empleamos en tramitar la Renta de Garantía de Ingresos, gestionar convocatorias, etc. por lo que me atrevería a decir que lo que los usuarios echan en falta, es esa vocación de servicio”.
Las tareas burocráticas no nos permiten trabajar en áreas como la orientación, el acercamiento a las empresas, y ejercer la función de intermediación e inserción
Gloria Múgica asegura que, “estamos en un momento de transformación general de la sociedad y del empleo, provocado por la pandemia. Se están produciendo una serie de cambios muy rápidos y necesitamos acercarnos a esos actores, saber qué está pasando en las empresas y en qué podemos ayudarlas, porque de ellas depende que podamos dar servicios a todos los demandantes de empleo”. También es relevante que trabajemos en “la evaluación de los programas en los que están trabajando en estos momentos y de los que se pondrán en marcha en el futuro, con un carácter mucho más innovador y con una mayor perspectiva de servicios a nuestros usuarios y al tejido empresarial”
Otro de los aspectos que se trataron durante la participación de Gloria Múgica en los “Diálogos_Ergon” fue la conveniencia o no de establecer incentivos al empleo. En su opinión, “quizás no es la política activa más adecuada, pero en momentos de crisis como la que vivimos actualmente, puede ser una manera de mover el mercado. Hay otras políticas que pueden tener unos resultados mucho más eficaces, por lo que la existencia de estos incentivos al empleo es una de las medidas que deberemos analizar una vez que pase la crisis”.
Como señala Múgica, “en algunos casos las ayudas a la contratación, las utilizan aquellas empresas que ya tenían pensado contratar, e incluso sabemos que, si no necesitan nuevos empleados, no van a contratar”. No obstante, considera que sería necesario realizar una buena comunicación de los incentivos que existen en Lanbide, pues en ocasiones muchas empresas desconocen las ayudas a las que pueden optar.
Otro de los temas que se debatieron durante la reunión fue el de la importancia de la especialización de las políticas de empleo. Desde el punto de vista de Gloria Múgica, “desde nuestra llegada a Lanbide nos dimos cuenta de que era necesaria la especialización. Teníamos en marcha un modelo de atención polivalente, pero que no integraba dentro de él las políticas de intervención, por lo tanto, el primer paso para esta transformación en un verdadero servicio público es definir qué tipo de intervención quiero tener, qué servicio voy a dar y hasta donde voy a llegar.
Nuestro objetivo no es solo dinamizar el mercado laboral, sino definir un modelo de atención que no puede ser homogéneo, porque a pesar de que el País Vasco es un territorio pequeño, tenemos una diversidad tremenda en cada uno de los tres territorios, por lo tanto, no podemos trabajar con todos igual, porque eso provoca un servicio de poca calidad. La especialización tiene que convertirse en un objetivo, dar a cada uno lo que de verdad necesita, en cada uno de los territorios, y también pasa por relanzar la figura del prospector laboral”.
El último paso es el de la flexibilidad, “para que nuestras acciones se adapten a la realidad de cada territorio. Debemos incrementar la capacidad de los/las directoras de nuestras oficinas para trabajar con más autonomía con su tejido empresarial. Ello supone organizar a nuestros recursos desde el punto de vista de la flexibilidad”.
A lo largo de los “Diálogos_Ergon” se trataron también temas relacionados con la forma de trabajar desde Lanbide, a través de las personas y no de los colectivos. Ofrecer orientación e inserción, colaboración con terceros basada en la especialización de los servicios y el diseño de estrategias para conseguir que los equipos humanos, participen y colaboren para hacer posibles todos estos cambios.
“Para hacer la transformación que queremos hacer en Lanbide, hay que empezar por conocer las habilidades y competencias de nuestros profesionales, qué habilidades necesitamos adquieran o aprendan, para adaptarse y responder a todas las innovaciones que queremos introducir. Todo esto significa un cambio de gran calado y que no será posible sin contar con la colaboración del conjunto de los 1000 empleados que integran la plantilla de Lanbide”, asegura Gloria Múgica.