Norwegian ha citado este viernes (8 de febrero) a USO Sector Aéreo en representación de los tripulantes de cabina, y a Sepla por parte de los pilotos, “para la apertura del procedimiento colectivo”, según la propia convocatoria. Eso sí, el comunicado advierte que el acuerdo está muy pero que muy lejano.
«La compañía no nos facilita la asistencia y, además, en las reuniones previas que hemos mantenido con ellos, ya nos han dicho, literalmente, que nos van a entregar ‘un papelito’ y no la memoria obligatoria para documentar el cierre de bases e iniciar las negociaciones con los trabajadores», según explica Ernesto Iglesias, secretario general de USO en Norwegian.
Desde los sindicatos denuncian que la empresa está empleando una estrategia «de mala fe», instando a los tripulantes de las bases de Canarias y Baleares a acogerse a un traslado voluntario con la intención de ahorrarse los costes que supondrían los despidos. «Están amedrentando a los trabajadores de forma individual con la excusa de que un traslado voluntario los salva del despido», explican desde USO. Además, acusan a Norwegian de no acogerse a la legislación española, aprovechándose del atractivo turístico español pero incumpliendo la normativa laboral.
Así pues, es la última oportunidad que le dan a la empresa antes de convocar huelga en todas las bases de España. Si este viernes no ha acuerdo… el próximo paso será la huelga.
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