Sin duda, si algo nos ha traído el coronavirus es un nuevo entorno, una nueva realidad, una nueva normalidad. Y como ocurre en todos los aspectos de la vida, a lo nuevo hay que adaptarse y hay que acostumbrarse. Nos ha pasado con las acciones más cotidianas de nuestra vida como puede ser hacer la compra o tomarnos un café. Pero también está pasando y seguirá pasando en el mundo laboral.
El entorno del trabajo ha cambiado por completo. Las diferentes entre la forma de trabajar antes y después del coronavirus son importantes y, por ello, acostumbrarnos a ellas será clave para un buen devenir a nivel laboral y económico. Pero no se trata de una realidad estática, para nada; hablamos de una realidad en constante cambio y evolución, con modificaciones y avances a diario. Lo que hoy es excelente quizás en unas semanas ya no lo sea. Por ello, la flexibilidad se convierte en un concepto clave de esta nueva realidad laboral y general.
Y es que ser flexible permite adaptarte a los cambios con mayor rapidez. Lo hemos visto con el teletrabajo obligado por el confinamiento o la adaptación a las nuevas normas de seguridad como la mascarilla o la distancia de seguridad. La flexibilidad es y será vital en el nuevo mundo laboral.
De todo ello hemos hablado en el webinar ‘El futuro del trabajo: la flexibilidad en la gestión de equipos’, organizado por Impact Hub y RRHHDigital en el que expertos como Amelia Pérez, responsable de RRHH de Línea Directa, Pablo Flores, Head of Leadership & Talent de Heineken y Noelia González, Talent & Culture Manager de Impact Hub Madrid nos han hablado de cómo gestionar esta flexibilidad necesaria en el nuevo mundo laboral.
Estas son las claves que extraemos de su debate digital:
1. Teletrabajo
Sin duda, el trabajo en remoto es la medida estrella de este nuevo entorno laboral. Debemos acostumbrarnos a ello porque ya sea de forma mixta o absoluta, la mayoría de los trabajadores tendrán que afrontar jornadas de actividad desde su casa. Y es que todo y todos apuntan a que el teleletrabajo es un medida necesaria y beneficiosa para todos los sectores incluídos en el mundo del trabajo. Ya lo dijo Pablo Flores, que «el 93% de los managers encuestados por Heineken afirman que el teletrabajo es igual o más productivo que el trabajo presencial«, según un estudio de Heineken.
En la misma línea insistía Noelia González, basándose en su experiencia propia y la de otras compañías de las que son testigo a diario: «La crisis del coronavirus ha obligado a las empresas a reaccionar y se ha demostrado que sí se puede trabajar a través de esta nueva forma de trabajo, que es factible, se puede llevar a cabo y es muy productiva para las empresas«.
Eso sí, los panelistas del webinar han dejado claro que «el teletrabajo mal implementado puede causar muchos problemas a empresas y empleados«, tal y como reconocía Amelia Pérez.
2. Jornadas flexibles
La flexibilidad no consiste solo en el espacio donde trabajamos sino también en «cómo y cuándo trabajamos«, alertaba Pablo Flores. Y es que el hecho de poder adaptar las circunstancias personales de cada trabajador, sus necesidades, a su trabajo resulta esencial para gestionar con éxito la flexibilidad laboral.
«Nosotros contamos con más de 300 modalidades de jornada laboral para adaptar el horario a las necesidades de los trabajadores. Los modelos tienen que ser creados entre todos, porque todo lo que se limita tiene dificultades«, explicaba Amelia Pérez basándose en lo que ya ejecutan en Línea Directa. Por su parte, Noelia González insistía en que «después de estos meses hemos aprendido que este modelo de trabajo flexible, es un modelo adecuado para la gran mayoría de empresas».
3. Una nueva forma de liderar
Pocos saben y por ello deben adaptarse. Esto de liderar en remoto y en entornos flexibles es algo muy novedoso en nuestro país. Y, debido a ello, necesita de cambios en la formación, empezando por el liderazgo. «Ha cambiado el tipo de líder: liderar en remoto supone conocer qué necesita cada uno de tus colaboradores, no vale hacer lo mismo con todos«, detallaba Amelia Pérez.
Y es que no es lo mismo dirigir y liderar de forma presencial, teniendo contacto y control directo con la actividad que hacerlo a través de una pantalla. Nuevos tiempos, nuevas formas de liderar en base a la confianza, otro término que ha sido muy repetido durante la charla.
Los coworking y los sistemas híbridos
Los coworking, o espacios colaborativos, son una moda que lejos de ser pasajera ha venido para quedarse y seguir creciendo. Y lo hará por varios motivos: en primer lugar porque muchas empresas, especialmente las más pequeñas, no podrán garantizar las medidas de higiene y seguridad imprescindibles y pueden buscar cobijo en estos espacios. Precisamente a ellas hacía alusión Noelia González: «Es fundamental pensar en unos espacios que te aseguren que las medidas de salud estén garantizadas, ya que hay oficinas en las que va a ser imposible garantizar el espacio, las medidas…«.
Por otro lado, porque se trata de espacios de colaboración, modernos y novedosos que ofrecen mucho más que las oficinas tradicionales que serán tendencia en los próximos años. «El concepto de la colaboración se nos ha puesto delante en el confinamiento y creo que va a ser clave en el futuro del trabajo en nuestro país«, insistía Noelia González.
Hablando de entornos híbridos, en los que se mezcle el teletrabajo con la actividad presencial, Noelia hacía hincapié en que «deben existir las conexiones entre personas». «Si conseguimos tener eso, la productividad va a aumentar«, explicaba. Y eso se puede conseguir en los citados coworking.
Cultura corporativa
Por último, quizá la clave más importante. Todo cambio, ya sea más grande o más pequeño, requiere modificaciones culturales. En este caso, la implantación del teletrabajo o de sistemas colaborativos, híbridos… necesita de un gran cambio en la cultura corporativa, un cambio que no se puede hacer de la noche a la mañana. «Es muy importante trabajar la cultura corporativa porque el teletrabajo o un modelo híbrido no se implanta en un día, es un proceso«, comentaba Amelia Pérez.
Y, finalmente, Noelia González hacía una reflexión final muy acertada en relación con el cambio en la cultura corporativa y como es más importante que nunca mantener es propósito único entre empresas y equipos: «La cultura corporativa es más importante que nunca si vamos a estar teletrabajando, con modelos híbridos, confianza… el poder trasmitir a los equipos los valores y la misión es fundamental. Si realmente queremos que el trabajador siga enganchado al proceso, necesitamos trabajar la cultura corporativa y tener al equipo alineado porque se corre el riesgo de que, desde casa, se desvincule más«.
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